Hace unos días tuve la oportunidad de conversar con uno de esos personajes con una gran visión empresarial. Se ha reinventado varias veces y tenía muchas ganas de disfrutar de su compañía y conocer sus nuevas experiencias en el sector de la empresa.

Curiosamente él me reveló sus ganas por conocer varios de los métodos de entrenamiento que se están desarrollando en el mundo del deporte… Y en pleno debate, sin apuntes ni libros de por medio sacamos tres conclusiones llanas, naturales y honestas para el correcto funcionamiento de los equipos.

Digamos que estas tres particularidades que pudimos crear en un ambiente distendido de una cafetería, tendríamos que analizarlas con un mayor rigor, sin embargo, las considero muy valiosas porque salieron de nuestro interior, de la propia experiencia y, sobre todo, desde la integridad de dos personas que habían quedado para aprender y mejorar en sus diferentes trabajos tan dispares, como tan similares en la esencia de la dirección de grupos.

 

JERARQUÍA

Disponer de unos escalafones dentro de un equipo va a suponer que estemos clasificados para que, desde el respeto, vayamos tomando las decisiones de una manera justa. El trato debe ser igual para todos, el peso del equipo hay que llevarlo entre todos y nos necesitamos unos a otros. Una jerarquía no s va ayudar a establecer unos límites claros entre los componentes del equipo.

Dentro de una buena jerarquía tendremos personas obedientes que miren por y para el equipo, sabiendo utilizar sus momentos para hablar y dar sus opiniones sin saltarse rangos que puedan afectar en el bienestar del equipo.

 

ROLES

Los roles no necesitan estar directamente relacionados con la jerarquía. Lo importante es conocer que es lo que mejor saben hacer los componentes del equipo y así hacer un reparto razonable. El objetivo es que cada integrante esté cómodo con su tarea y poder extraer, así, lo mejor de cada uno de las personas que integran el equipo.

Hay muchos tipos de roles, hace unos meses asistí a una formación sobre el trabajo de roles y lo que está claro es que para que un equipo de alto rendimiento tenga éxito y sea plenamente eficaz, es fundamental una gestión correcta de los diferentes comportamientos que hay en el equipo. Por tanto, algunos individuos son más de acción que otros, otros prefieren estar relacionados con el desarrollo de las personas y luego están los que encajan más en un perfil intelectual…

 

RUTINAS

El refranero español dice que “el hábito no hace al monje”, no todo es como parece, no es suficiente aparentar, lo que nos va a llevar a la excelencia como equipo es el ser… Y unas buenas costumbres nos relacionan con una práctica útil para ejecutar el trabajo que corresponda.

La rutina nos da orden y crea un sistema de trabajo directamente conectado con una efectiva productividad. Por ejemplo, tan importante es empezar a la hora como terminar, también, según lo pactado… Extenderse en el tiempo en divagaciones, en tareas repetitivas o en reuniones poco organizadas conllevan a un desgaste de energía que propician el abandono de la fidelidad por el equipo.

 

 

REFLEXIONES DEL GUERRERO DE LA LUZ:

PASANDO Y SOBREPASANDO  (Paulo Coelho)

 

Un guerrero de la luz nota que ciertos momentos se repiten.

Con frecuencia se ve ante los mismos problemas y situaciones que ya había enfrentado.

Entonces se deprime, comienza a pensar que es incapaz de progresar en la vida, ya que los momentos difíciles siempre vuelven.

“Yo ya pasé por esto”, reclama a su corazón

“Realmente ya has pasado”, responde el corazón “pero nunca has sobrepasado”.

El guerrero entonces comprende que las experiencias repetidas tienen una única finalidad: enseñarle que todavía no ha aprendido.

Y entonces pasa a buscar una solución diferente para cada lucha repetida, hasta que encuentra la manera de vencerla.