El baloncesto es un deporte de equipo. Todos los entrenadores trabajan en los entrenamientos para que cada jugador actúe como uno sólo, todos a una: Un pase a un compañero sólo, usar el cuerpo (bloquear) para que otro compañero salga sin defensor a tirar, ayudar en defensa a un compañero que ha sido rebasado… Podemos encontrar miles de ejemplos en el deporte y es el entrenador uno de los encargados en formar equipo.

Trabajar en equipo puede generar muchas preguntas. ¿Cómo podéis tú y tus compañeros estar ahí el uno para el otro? ¿Cuál es la forma correcta de pedir y brindar ayuda? ¿Cómo caminas por la delgada línea entre ser cordial con tus colegas y ser demasiado amigable para el lugar de trabajo?

Voy a explicarte algunos consejos para ser un mejor compañero de trabajo y que las preguntas anteriores puedas responderlas más fácilmente.

 

Top consejos para ser buen compañero de trabajo 

Ahora sí, puedes poner en práctica las siguientes recomendaciones:

 

1. Aprende lo que les gusta (y no les gusta) a tus compañeros de equipo.

La forma más sencilla de ser un mejor compañero de trabajo es descubrir cómo les gusta a sus colegas llevar a cabo las reuniones de negocios. Eso es porque las reuniones, aunque importantes, pueden parecer una carga cuando salen mal. Es más probable que las reuniones de equipo salgan bien si actúas de acuerdo con tus compañeros de equipo.

2. Comunicarse en persona. 

La forma en que te comunicas con tus compañeros de trabajo puede afectar significativamente tus relaciones con ellos. Es fácil malinterpretar o malinterpretar los correos electrónicos y los mensajes instantáneos, por lo tanto, para ser un mejor compañero de trabajo, aumenta la cantidad de tiempo que pasa cara a cara con sus compañeros.

3. Trabaja con ilusión y ganas: Es contagioso.

Puede ser más fácil de lo que piensas motivar a tus compañeros de trabajo. Probablemente hayas escuchado la frase “predicar con el ejemplo”. Resulta que la investigación apoya este adagio. Céntrate en tu trabajo puede hacer que otros a su alrededor hagan lo mismo.

4. Sé siempre amable, nunca grosero. 

Pensar mucho no es lo único que es contagioso. Si deseas que tus interacciones con tus compañeros de trabajo transcurran sin problemas, no seas grosero. Evita las respuestas cortas y trata de entablar una conversación amena con tus compañeros. Si un compañero de trabajo es borde contigo, no traigas esa negatividad a la forma en que tratas a los demás. Cuando mantienes una actitud positiva en el lugar de trabajo, tienes el poder de mejorar la cultura de la empresa.

5. Sé honesto acerca de tu capacidad. 

La honestidad sobre tu capacidad puede convertirte en un gran compañero de trabajo. Eso no significa decir que sí a todo o no expresar cuando estás nervioso por asumir más. Simplemente significa hacerlo con tacto. En lugar de decir “Estoy ocupado”, intenta decir “Gracias por traerme esto. Tengo X, Y y Z en mi plato. ¿Hay alguna posibilidad de que pueda ver esto en uno o dos días?

De lo contrario, su compañero de trabajo podría pedirle ayuda a otra persona, y eso está bien: su compañero de trabajo está respetando su capacidad, ya que ha respetado su pregunta.

Ahora ya sabes cómo puedes ser buen compañero de trabajo y estar siempre con una sonrisa y buen ambiente. ¡Sé feliz en tu trabajo a diario!

 

LOS FUNDAMENTOS VITALES PARA PRACTICAR EL COMPAÑERISMO

Por María Carrascal

Un equipo es mucho más que la suma de las partes, lo mismo que el cuerpo humano es mucho más que la suma de dos ojos, dos piernas, el cerebro, el sistema digestivo…  Todos esos elementos no funcionan si no es en relación y con un objetivo común; la vida.

 

Entendemos que los equipos también son sistemas vivos y, por lo tanto, más allá de los miembros que lo forman, es fundamental mirar la calidad de las interacciones entre ellos y sobre todo, si están alineados en torno a un objetivo o propósito compartido.

 

Solemos decir que para que un equipo funcione bien, es fundamental que cada persona:

 

  • Se ocupe de su tarea, ocupe su LUGAR (que la oreja haga de oreja y no de pie) 😉
  • Se ocupe del TODO, mirando más allá de su tarea y prestando atención al conjunto. En el cuerpo humano hay órganos que a veces ralentizan sus funciones porque “el cuerpo tiene que derivar la atención a partes que necesitan más energía”.

En ese equilibrio entre “ocupar tu lugar y ocuparte del todo” el compañerismo se desarrolla saludablemente.